La puesta en funcionamiento de la nueva Central Térmica Parque Pilar, construida por la empresa Pampa Energía, es uno de los 20 proyectos adjudicados a través de la Resolución 21 del Ministerio de Energía por la cual en lo que va del año se incorporaron 872 Mw al sistema de interconexión eléctrica y culminará 2017 con un aporte de 2.585 Mw. La central térmica Pilar, aportará 100 nuevos Mw al sistema, elevando a 872 Mw el total de lo incorporados en lo que va del año.
Como referencia, se destaca que la energía que se viene sumando -a un año de adjudicadas las obras- supera la potencia que brinda la central atómica Atucha II, que es de 745 Mw, obra que demandaría una construcción estimada de 7 años con una inversión de entre 4.500 y 7.000 millones de dólares de acuerdo al tipo de reactor. Como parte de los 20 proyectos adjudicados por la Resolución 21, el Gobierno espera que de acuerdo al cronograma de puesta en marcha de las obras en ejecución para el 31 de diciembre próximo el aporte de nueva energía alcance los 2.585 Mw por sobre lo disponible en el sistema a fines de 2016.
En tanto que para el 1 de febrero el nuevo aporte de energía -siempre por la Resolución 21- se incrementará hasta los 3.080 Mw, a raíz de una sucesión de inauguraciones de obras de ampliación o de construcción comprometidas por los oferentes privados para los próximos seis meses.
La incorporación de los nuevos proyectos al sistema permiten garantizar que para los meses del próximo verano no habrá inconvenientes en la oferta de generación eléctrica, por lo cual las posibilidades de cortes en los picos de demanda se reducirán a eventuales inconvenientes de transporte o distribución.
Al mismo, tiempo, la mayor generación eléctrica mediante instalaciones nuevas de mayor eficiencia reduce las importaciones a las que cada año se deben recurrir de los países vecinos, con el consecuente ahorro de divisas.
La Resolución 21 del Ministerio de Energía, de marzo de 2016, convocó a las empresas interesadas en ofertar nueva capacidad de generación térmica y de producción de energía eléctrica asociada, con compromiso de estar disponible en el mercado eléctrico para satisfacer los picos de demanda del verano 2016/2017, el invierno 2017, y el verano 2017/2018.
Aquel proceso de licitación de nueva energía emergencial permitió al Gobierno nacional adjudicar un total de 2.871 Mw, de los cuales 1.915 Mw fueron en una primera etapa y los otros 956 Mw como producto del llamado a mejorar las ofertas económicas, lo que en conjunto significaba casi un 10 por ciento de la capacidad instalada.