El Gobierno que asumirá el 10 de diciembre podría disfrutar de la llegada de miles de millones de dólares a la Argentina gracias a la explotación de Vaca Muerta.
Escribe Maximiliano Taylor
El Gobierno que asumirá el 10 de diciembre disfrutará de la llegada de miles de millones de dólares a la Argentina gracias a la explotación de Vaca Muerta. Para eso no será condición mostrarse amigable con los ejecutivos petroleros, sacarse fotos ni recorrer los campos neuquinos. Ser “racional’’ le alcanzará a Alberto Fernández sin ser market friendly.
Esto es lo que evaluó el economista Rodrigo Álvarez, CEO de la consultora Analytica, en un estudio que desarrolló durante los últimos meses para la provincia de Neuquén.
No obstante, el siguiente Presidente tendrá que solucionar el problema de la deuda externa para conseguir financiamiento a bajo costo, porque de otra manera, entiende el economista, no habrá manera de atraer inversiones extranjeras.
Desde 2013, con el acuerdo entre YPF y Chevron, entraron inversiones por US$ 26.300 millones, que se sumaron a otros US$ 13.500 millones de inicio por ese convenio que viabilizó Vaca Muerta.
Analytica ponderó que los procesos de expansión de la producción, tanto en petróleo como en gas natural, se desencadenaron cuando existieron incentivos de precios y la respuesta fue un crecimiento superior al 20% desde el peor momento.
Por otra parte, Neuquén ya produce el 26% del crudo (apenas por detrás del 30% de Chubut) y el 54% del gas del país. En ambos casos tuvo un salto de 7 puntos porcentuales en relación a 2013.
Esto es con 36 concesiones de explotación no convencional en un área total de 8502 kilómetros cuadrados (km2). Ya se comprometieron inversiones por u$s 8373 millones en proyectos pilotos y 8 áreas pasaron a desarrollo masivo, apenas el 6% del total de Vaca Muerta.
Quince empresas nacionales e internacionales de reconocida jerarquía participan: YPF, Pan American Energy (que tiene adentro a la British Petroleum), ExxonMobil, Shell, Qatar Petroleum, Total Austral, Tecpetrol, Pluspetrol, Pampa Energía, Wintershall Dea, Petronas y Chevron son algunos ejemplos.
Analytica destacó que la productividad de Vaca Muerta comparada con Permian, en Estados Unidos, pasó de ser la mitad a quedar de igual a igual en los últimos siete años.
En cuanto a los subsidios, la administración de Mauricio Macri se irá habiendo destinado US$ 33.900 millones en cuatro años, casi la mitad que los US$ 57.700 que puso Cristina Fernández de Kirchner en su segundo mandato para mantener congeladas las tarifas.
A futuro, el mejor escenario de precios y condiciones de mercado multiplicará por 8 el valor de la producción de shale hacia 2030, según Analytica. Serían US$ 12.139 millones en petróleo y US$ 20.327 millones en gas.
En cambio, un mal escenario podría planchar esa curva, en la que igual habría un crecimiento cercano al 200%: US$ 4.501 millones para crudo y US$ 6.788 millones para gas.
El saldo comercial sería superavitario en US$ 12.238 millones en el mejor escenario para Vaca Muerta (a lo que se le pueden restar algunos miles de millones de dólares de déficit comercial en el resto de las actividades económicas) e igualmente en verde en un peor escenario, con US$ 3.829 millones.