Irak redujo del 40% al 30% su participación en el proyecto de 27.000 millones de dólares de TotalEnergies, aplazado durante mucho tiempo, reactivando un acuerdo que Bagdad espera que pueda atraer de nuevo la inversión extranjera al país. La empresa estatal iraquí Basrah Oil (BOC) participará en el proyecto.
El acuerdo se firmó en 2021 para que TotalEnergies construyera cuatro proyectos de petróleo, gas y energías renovables con una inversión inicial de 10.000 millones de dólares en el sur de Irak a lo largo de 25 años.
Como consecuencia de la Guerra del Golfo varias petroleras debieron abandonar el país y están regresando paulatinamente. La reactivación del proyecto es clave para los esfuerzos de Bagdad por revertir la salida del país de las grandes petroleras. Exxon Mobil, Shell y BP han reducido sus operaciones en Irak en los últimos años, lo que ha contribuido al estancamiento de su producción de petróleo.
Irak es el segundo mayor productor de la OPEP, y mantiene una producción diaria de alrededor de 5 millones de barriles.
El proyecto incluye la construcción de una red de gas natural para abastecer a las centrales eléctricas locales mediante la ampliación del yacimiento de Ratawi, la construcción de una instalación de tratamiento de agua de mar a gran escala para aumentar la producción de otros yacimientos mediante inyección de agua y una gran central de energía solar en la región de Basora.
TotalEnergies se encargará de la primera fase del proyecto de agua de mar, que costará 3.000 millones de dólares, según el comunicado.
QatarEnergy también formará parte del consorcio y tendrá una participación en el proyecto.
Irak posee reservas de petróleo probadas de 112 mil millones de barriles y reservas probables calculadas en 215 mil millones de barriles (10% del total mundial) y algo menos de la mitad de las de Arabia Saudita (26%). Según la Dirección de Información Energética de Estados Unidos (EIA, Energy Information Administration).