El programa de exportaciones de gas durante el período estival, dada la mejora en la producción y la retracción en la demanda, alcanzó un récord la semana pasada.
Según consta en los registros del Ente Nacional Regulador del Gas (Enargas), el viernes 29 de marzo se exportaron 8,3 millones de metros cúbicos (MMm3) de gas natural a Chile, y otro 0,1 MMm3 a Uruguay.
Las ventas de gas natural a Chile se reanudaron en septiembre del año pasado, cuando quedó en evidencia que el alza en la oferta, sostenida casi exclusivamente por el desarrollo de Tecpetrol en Fortín de Piedra, no podría encontrar suficiente demanda en el verano. Así fue como se cerró la inyección de pozos convencionales por hasta 15 MMm3 por día, que perjudicó fuertemente a YPF.
Con contratos interrumpibles que en su mayoría culminan el 1° de mayo a las 6 de la mañana, el viernes pasado se exportaron 5,6 MMm3 a través del sistema de Transportadora de Gas del Norte (TGN) y 2,7 MMm3 mediante los ductos de Transportadora de Gas del Sur (TGS).
De acuerdo a información del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), las ventas de gas natural a Chile significaron en enero ingresos para la Argentina de US$ 18 millones. Los datos de la Secretaría de Energía muestran que para 2018 las exportaciones de gas totalizaron US$ 65 millones, de los cuales US$ 34 millones fueron pagados por Uruguay a IEASA.
Por el lado de la importación, el fluido que llega de Bolivia se mantiene en unos 10,6 MMm3, mientras que el primer arribo de un barco con Gas Natural Licuado (GNL) para cubrir el pico de demanda de invierno se espera en Escobar recién el 12 de mayo.
La estatal Integración Energética Argentina S.A. (IEASA, ex ENARSA) todavía no informó cuántos cargamentos prevé comprar ni a qué precio, pese a que trascendió de fuentes oficiales que podría costar alrededor de US$ 6,50 por millón de BTU.