La mayor inequidad se da en el caso de los habitantes de las provincias de Misiones, Corrientes, Chaco y Formosa que no poseen servicio de gas natural por redes
Las provincias con tarifas diferenciadas pagan el gas hasta 10 veces menos
Los usuarios residenciales de gas de la Patagonia y de otras localidades alcanzadas por distintos amparos judiciales pagan en la actualidad hasta 10 veces menos que los clientes del resto del país, una asimetría que el gobierno pretende superar de manera gradual en un plazo de seis años con la implementación del nuevo cuadro tarifario que se discutirá en la audiencia pública convocada para el 16 de septiembre.
La disparidad se refleja en los extremos tarifarios que coexisten hoy en el servicio de gas natural por red que se extiende desde los 0,11 dólares por Millón de BTU en el caso de las provincias de San Luis, Mendoza y determinados municipios de la provincia de Buenos Aires, hasta el precio de 0,17 US$/MMBTU que rige en las provincias patagónicas y los 1,52 US$/MMBTU del resto del país.
A partir de esta disparidad provocada por la existencia de tarifas diferenciadas y por amparos judiciales existentes desde hace varios años que frenaron la aplicación de anteriores aumentos, el nuevo esquema del Gobierno contempla diferentes plazos de actualización con el objetivo de cumplir con la premisa de la Corte Suprema de disponer incrementos graduales y previsibles para los usuarios residenciales.
Así, el nuevo esquema prevé para el usuario residencial (con tarifa no amparada ni diferencial) un incremento del 203% promedio a partir del 1 de octubre con aumentos semestrales a partir del 1 de abril de 2017 y hasta el 1 de octubre de 2019, lo que permitirá alcanzar el precio de mercado del gas a boca de pozo y al mismo tiempo llegar del actual 81% de subsidio a cero.
Pero en el caso de los usuarios patagónicos, por ejemplo, en el mismo sendero planteado al 1 de octubre de 2019 se alcanzará a reducir al 57 por ciento los subsidios y con un nivel tarifario del gas a boca de pozo estimado en el 50 por ciento que en el resto del país, por lo que la proyección de equiparación se extenderá al menos otros tres años para las provincias del sur.
La mayor inequidad se da en el caso de los habitantes de las provincias de Misiones, Corrientes, Chaco y Formosa que no poseen servicio de gas natural por redes, y cuyos contribuyentes aportan al subsidio del 81 por ciento de lo que consume el resto del país.
A partir de amparos judiciales, las provincias de San Luis y Mendoza cuentan mediante la resolución 1070/2008 del entonces Ministerio de Planificación, una tarifa de 0,11 US$/MMBTU, a lo que se suman los municipios bonaerenses de General Pueyrredón, Balcarce, Mar Chiquita, Coronel Pringles, San Cayetano, Pehuajó, Dolores, Villa Gesell, Tres Arroyos y González Chávez.
También existen usuarios amparados de General Belgrano, Azul, Olavarría, Bolivar, Lamadrid, Benito Juarez, Laprida, Tandil, Rauch, Las Flores, Roque Perez, Saladillo, Alvear, Tapalqué, General Viamonte y Lobería.
En cuanto a los denominados usuarios con tarifa diferencial, la tarifa vigente es de 0,17 U$S/MMBTU a partir de la resolución 226/2014 que alcanza a las provincias patagónicas de La Pampa, Neuquén, Río Negro, Chubut, Santa Cruz y Tierra del Fuego, a las que también se suma la Puna jujeña.
Pero las diferencias tarifarias no explican solamente la disparidad de las facturas que recibe un usuario residencial, por ejemplo, de las provincias patagónicas y sus pares del resto del país, sino que debe sumarse los dispares umbrales que aplican las distribuidoras del servicio, es decir las categorías en que se encuadra cada usuario de acuerdo a su consumo.
En una comparación de lo que paga por el mismo consumo un usuario de Tucumán, que recibe el servicio de la distribuidora Gasnor; de la Ciudad de Buenos Aires de Metrogas, de Santa Cruz de Camuzzi, y de La Pampa de Camuzzi Gas Pampeana, se pueden registrar diferencias en las facturas desde el 400 al 1.800 por ciento de acuerdo con el nivel de consumo.
Así, un usuario residencial que consume 1.500 metros cúbicos al año paga 10 pesos como factura media mensual sin impuestos si vive en Santa Cruz o La Pampa, 158 pesos en la Ciudad de Buenos Aires o 265 pesos en Tucumán; y en el caso de un consumo anual de 5.000 metros cúbicos la amplitud de las facturas se estira desde los 15 a los 855 pesos.
Esta combinación de tarifas y umbrales de consumo provocó una injusta distribución de subsidios de acuerdo a cuál de las dos transportistas y nueve distribuidoras que operan en el país se reciba el servicio, lo que obligó al Gobierno a plantear diferentes esquemas para incrementar las tarifas y reducir a cero el aporte del Tesoro.
Una situación de disparidad también se registra en el caso de los usuarios comerciales, entre los que coexisten cuatro tipos de tarifas que se extienden desde 0,11 US$/MMBTU en el caso de las provincias de Río Negro y Neuquén a partir de la resolución 226/2014 y los 0,22 US$/MMBTU por la misma resolución para Mendoza, San Luis, Córdoba, Santiago del Estero, Jujuy y algunos municipios bonaerenses.
A estos dos cuadros tarifarios se suman aquellos usuarios comerciales contemplados en las resoluciones 28/2016 y 129/2016 con una tarifa de 0,66 US$/MMBTU para las provincias de Tierra del Fuego, Santa Cruz, Neuquén y La Pampa o de 1,32 US$/MMBTU en Buenos Aires, Entre Ríos, Santa Fe, San juan, La Rioja, Catamarca, Tucumán y Salta.