PETRÓLEO & GAS

Rigen nuevos precios libres para los combustibles, con suba promedio del 5%

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Con el primer minuto posterior a la caducidad de la resolución que había establecido un congelamiento de precios a los combustibles líquidos por 90 días entró en vigencia un nuevo cuadro de precios para las naftas y gasoils con un aumento promedio de 5 por ciento.

A modo de referencia para el ámbito de la Ciudad de Buenos Aires la petrolera YPF decidió que el litro de nafta súper en las estaciones de servicio de la marca cueste ahora 50,19 pesos, el de la nafta premium Infinia 57,94 pesos, el litro del Diesel500 ( común) 46,99 pesos, y el de Infinia diesel 54,99 pesos.

Por tratarse de la compañía que, de lejos, es la de mayor participación en el mercado local (cerca del 60 por ciento) la decisión de precios de YPF –de mayoría accionaria estatal- condicionó al resto de las petroleras refinadoras-comercializadoras como son Shell y Axion, aún cuando éstas últimas hubieran preferido ajustar sus precios en un porcentaje mayor.

Raízen (Shell) también lo hizo en el 5 por ciento y en la CABA sus precios de referencia son 50,64 pesos por litro para la nafta Súper, 58,56 pesos para la premium V-Power, 49,34 pesos para el Fórmula diesel (común), y 55,98 pesos para el V-Power diesel.

En el caso de Axion, los nuevos precios en sus estaciones de servicio de la CABA son de 50,29 pesos para la nafta Súper;  58,34 pesos para el litro de la nafta Quantium; 48,28 pesos para el diesel común, y 55,85 pesos para el Quantium diesel.

Este ajuste de precios es el noveno en lo que va del año, incluídos dos que la Secretaría de Energía autorizó en setiembre y en octubre, a pesar del congelamiento que ella misma había dispuesto en agosto, luego de la derrota electoral del oficialismo en las PASO. Procuraba con esta medida al menor contener la inflación pero ello fue infructuoso en el marco de una nueva y fuerte devaluación del peso en relación al dólar.

Este último factor, además, acentuó un retraso en los precios de los combustibles al considerar que éstos se actualizan en el mercado local en base a una ecuación integrada por la evolución de la cotización del crudo Brent, el ajuste periódico del precio de los biocombustibles que se utilizan para el “corte” de las naftas y gasoils, y también por la evolución del dólar versus peso.

Al momento del “descongelamiento” las empresas del rubro calcularon el retraso de precios de los combustibles en torno al 16 por ciento, y ahora que el gobierno saliente decidió volver al esquema de precios libres, procuran recuperar dicho porcentaje, o al menos una parte importante, antes del cambio de gobierno nacional es decir antes del 10 de diciembre, previendo que tal vez la futura Administración revise el actual esquema de ajuste de precios.

Así las cosas, en el mercado petrolero se estima que al incremento promedio de 5 % ya dispuesto le siga uno no inferior al 6 por ciento en el arranque de diciembre.

El “descongelamiento” también alcanza al precio del barril de crudo que se comercializa para el mercado interno para su refinación, con lo cual pasa de 59 dólares a 62 dólares, tomando como referencia la evolución del precio internacional para crudos similares.

Por otra parte,  el gobierno de Mauricio Macri está resolviendo por estos días la aplicación del impuesto que grava a los combustibles líquidos (ICL) que también había postergado por las elecciones, para reducir el impacto en el precio final al público. De hecho, se calcula que en los primeros días de diciembre los precios de los combustibles se ajustarían a la suba en torno al 5 por ciento sólo por la incidencia impositiva, aunque cabe la posibilidad de que este tema quede a consideración del próximo gobierno.

Por otra parte, y con relación al precio del gas al consumidor, el presidente del Enargas,  Mauricio Roitman , indicó a E&N que está previsto aumentarlo a partir de enero próximo en base a la actualización por la evolución del tipo de cambio desde marzo (41 pesos por dólar) a octubre (en torno a los 56 pesos) en lo que se refiere al componente tarifario Valor Gas.

De acuerdo con la política tarifaria vigente, esta actualización correspondía ser aplicada en octubre  pero el gobierno dispuso su postergación hasta enero (también por las elecciones).

Dicha postergación también implicó el reconocimiento a las empresas del rubro de una compensación por los menores ingresos en los meses comprendidos, autorizándoles menores inversiones durante dicho lapso en relación a las comprometidas al momento de la presentación de sus respectivos planes cuando se concretó la Revisión Tarifaria Integral (RTI).  Las empresas presentaron sus respectivos informes al Ente Regulador, y están siendo evaluados, se indicó.

Además, la factura por el suministro del gas también se vería actualizada en sus precios para los componentes de Transporte y de Distribución, de acuerdo con la evolución registrada en el Indice de Precios Internos al por Mayor (IPIM), del semestre previo.

Estos aumentos en las tarifas del gas deben atravesar la instancia de una audiencia pública en diciembre. Su eventual revisión dependería de una decisión del gobierno entrante.

Cabe recordar que lo que sí está vigente es la decisión de Energía de cobrar en las facturas que las distribuidoras emitan desde diciembre próximo y hasta abril de 2020, el 22 por ciento del precio del componente Gas consumido durante el último invierno, cuya postergación había sido resuelta para aplanar las facturas de los meses de mayor consumo.


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